DIY Vestido camisero sin patrón.
Me encanta la primavera, para mi es la estación más bonita
del año. Los días cada vez son más largos, todo está verde y lleno de flores y
la temperatura empieza a ser más agradable.
Aunque tengo que reconocer que es de las peores épocas para
vestirse. Como por la mañana te abrigues porque hace algo de frío seguro que
por la tarde brilla el sol y te achicharras, y si por la mañana sale el sol,
cuidado porque seguro que por la tarde te mueres de frío. Y de la lluvia mejor
ni hablamos…
Así que yo intento optar por prendas un poco versátiles como
los vestidos camiseros; que llueve un poco pues nos ponemos unos botines, que hace calor, pues abrimos botones y sacamos un poco las piernas al sol, que
hace algo frío pues cerramos botones, nos ponemos una chupa por encima y a
correr.
Para este vestido además la tela es un algodón de grosor
intermedio, por lo de ni frío ni calor, eso sí, un poco más alegre con un
estampado de flores aunque con un fondo negro muy neutro.
Necesitaremos:
Cinta métrica.
Alfileres.
Tijeras.
Máquina de coser.
Aguja e hilo.
Una camisa amplia.
1,5m de tela. (Depende un poco del largo que le queráis dar)
10 botones.
Empezamos por cortar todas las piezas que necesitamos
utilizando nuestro camisero como patrón.
Colocamos nuestra camisa doblada a la mitad con las mangas
hacia dentro y calcamos la forma en nuestra tela; ahora es el momento de hacer
las modificaciones que queramos, como por ejemplo añadirle de largo.
Para el delantero yo aprovecho los orillos de la tela, así
empiezo a marcar desde ahí y no tengo que añadir centímetros para el cruce de
la solapa. Además luego irán doblados hacia dentro y no se verán.
Para la espalda siempre intento poner la tela
doble para poder sacarla de una sola pieza y eliminar una costura.
*Marcamos siempre 1cm de más en todas las piezas para tener
margen para las costuras.
Ahora copiamos también las dos piezas del cuello.
Yo las corté dobles, así el cuello tendrá más cuerpo y
además no se verá el revés de la tela.
Por último cortamos seis tiras, de 2cm de ancho y 54cm de largo, para hacer
una especie de vivos con los que rematar las sisas.
Empezamos a coser nuestro vestido uniendo primero los
hombros y luego los costados.
Ahora le damos forma al cuello.
Empezamos uniendo el cuello y la base con un pespunte al
borde por el revés. (Repetimos con las dos otras piezas que tenemos)
Después encaramos los dos derechos y pasamos otro pespunte
al borde por todo menos la base, cuando terminemos le damos la vuelta.
Lo siguiente será colocar el cuello con ayuda de unos
alfileres y coserlo.
Pasamos al delantero de nuestro vestido y doblamos hacia
dentro los orillos, o el margen que dejarais de cruce, y pasamos un pespunte
por el derecho a 1,5cm.
Ahora marcamos por todo el largo los ojales a unos 6cm unos
de otros.
Si sois muy curiosas y pacientes podéis hacerlos a mano, yo
prefiero usar el prensatelas para ojales.
Marcamos en la otra solapa los botones y los cosemos...esta
vez sí que hay que hacerlo a mano.
Para terminar rematamos las sisas cosiendo las tiras que
cortamos antes.
Son tres para cada sisa e irán cosidas con un pespunte en el
centro, una encima de otra.
Así nos quedará un efecto de pequeño plisado o volantito,
que en cuanto le demos un poco de uso al vestido empezará a deshilacharse un
poco y quedará más coqueto.
Y con este último detalle ya tenemos listo nuestro vestido
camisero.
Como es bastante flojito y no tiene pinzas, a mi me gusta marcar un poco la cintura con un cinturón.
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